Agujas circulares

Hola coleguitos!


Últimamente estoy usando mucho las agujas circulares para tejer a dos agujas.



A mí me daban un poco de miedo y me ecahaban para atrás, pensaba que había que tejer de manera diferente o que implicaba algún tipo de complicación que no iba a ser capaz de manejar.

¡Pero nada más lejos de la realidad! Es genial para hacer piezas grandes, como mantas o colchas.


En las agujas rectas, si echas muchos puntos, es bastante complicado y coñazo.
Con las agujas circulares, el peso de la labor reposa sobre el cable, siendo más cómodo después de un rato dándole a la aguja.

Las agujas circulares son perfectas también para piezas circulares, como puede ser un jersey de cuello alto, o un jersey normal (empezándolo por el cuello) o un gorro, entre muchas otras cosas.

Después de tejer la primera vuelta, se engancharía el último punto de la primera vuelta con el primer punto de la segunda vuelta, y ya estaría cerrada la labor en círculo. Es henial porque evitar tener que coser posteriormente y cerrar a mano lo que estés tejiendo.



No tengais miedo a estas agujas. Os animo a que las useis y, si teneis alguna duda, podeis escribir a maria@anacondasweet.com y resolveré con amor y paciencia todas vuestras dudas.

Y si vivís en Sevilla, recordad que un grupito de amigas quedamos todos los lunes para avanzar en nuestras labores y enseñarnos mutuamente a tejer. Si os animais a venir, pasaos por el Starbucks de Puerta de Jerez los lunes a partir de las 17'30!!!


Red Velvet Cupcakes (o como ser tipica en San Valentín)

Yo quería innovar, ¡lo juro! pero mi cabeza me decía una y otra vez "Necesitas comerte un red velvet cupcake" y no pude llevarle la contraria. En mi defensa puedo decir que nunca los había hecho para San Valentín, ¡es mi primera vez! En un primer momento pensé en hacerlos en version whoopie pie con forma de corazón, luego en hacer una tarta o galletas... pero nada que mi cabeza pedía cupcakes, así que me puse manos a la obra con la recepta de mi querida Joy of baking
Entre que no tengo una buena camara y que no tengo mucha idea de fotografia se ven marrones pero juro que son rojos.
Ingredientes (para 12 cupcakes)
  • 125 gramos de harina de repostería.
  • 1/4 de cucharadita de levadura en polvo.
  • 1/4 de cucharadita de sal.
  • 10 gramos de cacao puro en polvo (yo uso el de Valor, ¡nada de usar Cola Cao ni nada parecido!).
  • 57 gramos de mantequilla a temperatura ambiente.
  • 150 gramos de azúcar.
  • 1 huevo L.
  • 1/2 cucharadita de extracto de vainilla (Nielsen Massey es mi preferido)
  • 120 ml de buttermilk (se puede hacer con 120 ml de leche tibia, añadiéndole 1/2 cucharada de vinagre blanco, dejando reposar 10 minutos)
  • 1 cucharada de colorante rojo (yo he usado el colorante en gel Wilton de color rojo navidad)
  • 1/2 cucharadita de vinagre blanco.
  • 1/2 cucharadita de bicarbonato sódico.
Para el cream cheese frosting he usado una receta de Alma que probé hace tiempo y me encanto por su color blanco y su consistencia:
  • 125 gramos queso crema frío (yo usé el de Mercadona pero cualquier crema tipo Philadelphia vale, importante que no sea light, que tiene poca grasa y queda muy líquido).
  • 60 gramos mantequilla a temperatura ambiente.
  • 300 gramos de azúcar glass.
  • 1 cucharada de leche.
  • Unas gotas de vainilla incolora Wilton (esto lo he añadido yo a la receta).

Precalentamos el horno a 175 grados y preparamos en un bol la harina, cacao, sal y levadura, ¡tamizándolos claro!
  1. Como siempre, batimos con la pala de la KitchenAid la mantequilla con el azúcar y cuando esté esponjosa añadimos la vainilla y el huevo.
  2. Batimos el buttermilk con el colorante. Si, tiene pinta de leche cortada y huele a yogur, pero os juro que da muy buen sabor jaja.
  3. Ahora añadimos a la mezcla de mantequilla y azúcar la mitad de la mezcla de harina and company, luego, sin parar de mezclar con la pala, echamos el buttermilk y finalmente añadimos la última mitad de harina and company.
  4. ¡Ya sólo queda el toque final! mezcla la media cucharadita de vinagre con la media cucharadita de bicarbonato y lo dejamos burbujear. En este momento pensáis que vaya receta rara y dudáis de que seguid mis consejos sea bueno, ¡pero os equivocais! estan muy ricos.
Ahora os dais prisa y llenáis las 12 capsulas (previamente colocadas en la bandeja para cupcakes) hasta 2/3 de su capacidad y las metéis en el horno. En 18 minutos o así estarán, en mi horno tardo 16 pero en otros tarda más, así que recurrid al viejo truco de pinchar con un palito metálico (a.k.a el pincho de los pinchos morunos si no tenéis nada más sofisticado). Una vez sacados del horno los dejáis enfriar bien antes de ponerles encima el frosting, que se hace tal que así:
  1. Se bate con la pala la mantequilla con el azúcar glass, las gotitas de vainilla Wilton y la leche. Si no tapas el bol con un trapo al hacer ésto te arrepentirás toda tu vida y maldecirás a toda mi estirpe, ¡tápalo por Dios!
  2. Cuando la mezcla anterior sea homogénea añade el queso crema bien frio hasta que todo quede cremoso.
Ya sólo tienes que meter la crema en una manga pastelera con la boquilla 1M y decorar los cupcakes como te guste.
Animaros a prepararlos que son un clásico que nunca falla, y además estan de muerte.
Ala me voy corriendo a hacer el salva manteles con forma de corazón que puso María en el post anterior, que aún estoy a tiempo :)

¡Muaaaaah!
Leti

salva-manteles de corazón

Para celebrar un poco San Valentín, se me ha ocurrido compartir este patrón para elaborar un salva mantel de crochet en forma de corazón.




Yo aún no lo he hecho, me ha llegado el patrón en una newsletter de lanas Katia.

Podeis descargar el patrón aquí!